¡Qué experiencia tan increíble! Me lo pasé genial y recomiendo encarecidamente este tour. Tanta historia familiar, así como la cultura colombiana, se mezclaron para hacer de esto algo más que una visita a una granja. La ubicación era impresionantemente hermosa, el desayuno y los aperitivos eran deliciosos: imagina comer huevos frescos que acabas de recoger junto con mantequilla fresca, queso y pan hechos en el lugar, y agua filtrada que provenía de la montaña. Había baños modernos. Esta fue la primera vez que monté a caballo y fue a lo largo de un sendero que tiene mucha historia. Juan era conocedor, paciente, divertido, bilingüe y un anfitrión amable. Se comunicó con nosotros para confirmar con antelación y apreciamos que nos recogieran directamente en nuestro Airbnb. Sigue sus instrucciones: lleva manga larga y gorra, lávate las manos y ten en cuenta que el paseo por el sendero será un poco desafiante pero divertido y que hay mucho apoyo. Me alegro mucho de haber elegido esta experiencia y sin duda volvería a visitarla.